Hoy, mientras te besaba, he sabido que, por mucho que se enrevese la trama, todo va a salir bien.
Y entonces, la música ha subido su volumen, y ha atronado a mis malos pensamientos, haciéndolos huir, y tú me has cogido la mano, y yo les he dejado ir.
Hoy quiero romper mis condenas.
Hoy quiero vivir , ay mis penas.
Y a tu vera, verlas partir.
Y luego el plano se ha hecho general, y la ciudad se ha visto desde lo alto, cada vez más pequeña. Y la pantalla se ha ido oscureciendo, mientras las últimas notas coloreaban de buen sabor mi boca.
Esto es el final. Esto, ay meu Deus, sólo es mi principio.
S.S
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